Las nuevas tecnologías están concentradas en el procesamiento
de la información. Tanto la información como la tecnología han sido elementos
cruciales en todas las revoluciones tecnológicas, ya que en último término la
tecnología supone la habilidad para efectuar
nuevas operaciones o para realizar mejor las prácticas ya establecidas
sobre la base de la aplicación de nuevos conocimientos.
Sin embargo, lo que distingue al actual proceso de cambio
tecnológico es que la información constituye tanto la materia prima como el
producto.
El paradigma en sí existe y articula un grupo convergente de
descubrimientos científicos concentrándose en el proceso de la información y
utilizando la capacidad informacional recién adquirida para permitir su
articulación y comunicación a lo largo de todo el conjunto de innovaciones
tecnológicas. Por ejemplo, nosotros, como clientes de un determinado banco,
habituados a realizar compras con la tarjeta de crédito, podemos estar siendo
analizados por un equipo de gestión de bases de datos, integrado en el banco en
cuestión.
Con ello, pueden contrastar nuestros hábitos de consumo,
poder adquisitivo, etc., y seleccionar un producto financiero, publicitario,
adaptado a nuestro perfil.
Otro ejemplo es el de la comercialización de los datos
privados por parte de empresas de telefonía. Esas bases de datos pueden ser de
utilidad para infinidad de empresas, que pueden utilizar la información como
materia prima para su actividad empresarial.
Un tercer ejemplo curioso se corresponde con la publicidad
recibida por parejas que han tenido un hijo recientemente. En las semanas
siguientes al nacimiento, es corriente que comiencen a recibir en sus
domicilios publicidad y ofertas promocionales de productos de consumo de bebés.
Para estas empresas, el acceso a esta información le permite
dirigirse a un público específico con un ahorro sustancial de tiempo y de
dinero, ya que descartan de antemano todos aquellos públicos a los que no les interesa
dirigirse.
Una de las características de la información que permiten
hacerla tan rentable es su inmaterialidad: no se gasta al usarse, como podría
ocurrir con otras materias primas materiales. Como consecuencia, una
información se puede vender infinidad de veces sin que varíe su composición
original.

No hay comentarios:
Publicar un comentario